El cambio climático y el impacto ambiental negativo que las actividades humanas han generado en el planeta son una realidad innegable que requiere la atención de todos, incluyendo a las empresas y organizaciones. La logística es una de las actividades que más emisiones de gases de efecto invernadero genera, especialmente en el transporte y almacenamiento de mercancías. Por esta razón, es esencial adoptar logística verde o sostenible que minimicen el impacto ambiental y fomenten las prácticas de sostenibilidad.

La logística verde es un enfoque integral que busca medir y minimizar el impacto ambiental de las actividades logísticas, desde la producción hasta la entrega al consumidor final. Esto implica una serie de acciones y políticas que buscan reducir la huella de carbono y otros impactos ambientales negativos asociados con la logística. Algunas de las prácticas que pueden adoptarse incluyen el uso de vehículos eléctricos, la optimización de rutas y la reducción de emisiones de carbono en los procesos de transporte y almacenamiento.

Además de ser socialmente responsable, adoptar prácticas de logística verde puede ser rentable para las empresas. La eficiencia operativa y la reducción de costos son algunos de los beneficios que pueden obtenerse al adoptar prácticas sostenibles. También puede ser una ventaja competitiva para las empresas que buscan atraer a consumidores cada vez más preocupadas por el impacto ambiental de los productos y servicios que consumen.

Las empresas que pueden adoptar prácticas de logística verde también abren nuevas oportunidades de negocio y acceden a nuevos mercados. Cada vez más empresas están exigiendo a sus proveedores y socios logísticos que adopten prácticas sostenibles, lo que puede ser un requisito para participar en licitaciones y acuerdos comerciales.

Es importante destacar que la logística sostenible no debe ser vista como una acción aislada, sino como parte de una estrategia empresarial más amplia basada en la sostenibilidad. Es necesario que la empresa tenga una visión integral y una agenda de sostenibilidad que abarque toda la cadena de valor, desde la producción hasta la entrega al consumidor final.

Por otro lado, es importante que las empresas estén al tanto de las condiciones ambientales en su país y en otros países donde operan. Las regulaciones ambientales están aumentando en todo el mundo y pueden tener un impacto significativo en el funcionamiento de las empresas. Por esta razón, es importante que las empresas estén actualizadas sobre las regulaciones y tomen medidas para cumplirlas.

En conclusión, la logística verde es una necesidad para las empresas que desean ser socialmente responsables y competitivas al mismo tiempo. Adoptar prácticas sostenibles puede reducir el impacto ambiental, mejorar la eficiencia operativa, reducir costos y mejorar la imagen de la empresa. Además, es importante que la logística sostenible sea parte de una estrategia empresarial más amplia basada en la sostenibilidad y que abarque toda la cadena de valor. Las empresas también deben estar al tanto de las condiciones ambientales en su país y en otros países donde operen para evitar multas y sanciones.